
Economía peruana en 2024: Estabilidad y retos
28.04.2025
Durante el primer trimestre de 2024, la economía peruana experimentó un crecimiento del 2.8% en comparación con el mismo período del año anterior, según informó el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP). Este crecimiento fue impulsado principalmente por dos sectores clave: la minería y los servicios. La minería, que representa aproximadamente el 10% del Producto Interno Bruto (PIB) y concentra el 60% de las exportaciones del país, continúa siendo un pilar fundamental para la economía peruana. Esto se debe en gran parte a la recuperación de los precios internacionales del cobre, materia prima que Perú produce en grandes cantidades y que ha beneficiado a las empresas del sector.
Por otro lado, la inflación en Perú se mantiene estable en torno al 2.5%, cifra que está dentro de las metas establecidas por el banco central. Para mantener esta estabilidad de precios, el BCRP ha ajustado las tasas de interés en varias ocasiones, buscando equilibrar el crecimiento económico con la estabilidad financiera.
El gobierno peruano sigue enfocado en invertir en infraestructura, como carreteras, puentes y proyectos sociales, además de implementar reformas estructurales que buscan potenciar un crecimiento más sostenido en el largo plazo. Estas políticas tienen como objetivo mejorar la productividad y atraer mayor inversión extranjera.
Sin embargo, no todo es positivo. El país todavía enfrenta riesgos externos, como la volatilidad en los mercados de materias primas, que puede afectar la recuperación económica. La incertidumbre en los precios internacionales del cobre y otros minerales puede influir en los resultados económicos futuros. Además, el entorno global sigue siendo desafiante, con economías en recuperación y cambios en las políticas internacionales que también impactan a Perú.
En resumen, Perú muestra una tendencia de crecimiento moderado y una economía estable, pero debe seguir atento a los riesgos externos y continuar con las reformas para mantener su impulso económico a largo plazo en un contexto global complejo.
Por otro lado, la inflación en Perú se mantiene estable en torno al 2.5%, cifra que está dentro de las metas establecidas por el banco central. Para mantener esta estabilidad de precios, el BCRP ha ajustado las tasas de interés en varias ocasiones, buscando equilibrar el crecimiento económico con la estabilidad financiera.
El gobierno peruano sigue enfocado en invertir en infraestructura, como carreteras, puentes y proyectos sociales, además de implementar reformas estructurales que buscan potenciar un crecimiento más sostenido en el largo plazo. Estas políticas tienen como objetivo mejorar la productividad y atraer mayor inversión extranjera.
Sin embargo, no todo es positivo. El país todavía enfrenta riesgos externos, como la volatilidad en los mercados de materias primas, que puede afectar la recuperación económica. La incertidumbre en los precios internacionales del cobre y otros minerales puede influir en los resultados económicos futuros. Además, el entorno global sigue siendo desafiante, con economías en recuperación y cambios en las políticas internacionales que también impactan a Perú.
En resumen, Perú muestra una tendencia de crecimiento moderado y una economía estable, pero debe seguir atento a los riesgos externos y continuar con las reformas para mantener su impulso económico a largo plazo en un contexto global complejo.
lFuentes:
BCRP: https://www.bcrp.gob.pe
MEF: https://www.mef.gob.pe